lunes, 5 de mayo de 2008

Los viajes de Walesa: Rino Gaetano

Como parece que el rencor de Carol no tiene límites, voy a seguir con esto de los viajes, que le estoy cogiendo yo el gustillo.

Esta semana seguimos en Italia, ya sabéis que le tengo mucho aprecio a este país, a pesar de Berlusconi y el mundial del 94, y precisamente se lo tengo gracias a personajes como Rino Gaetano. Un entendido, de esos que tienen un pie aquí y otro allá, me dijo que hablar de Rino en Italia es algo así como hablar de Sabina en España, aunque personalmente, y conociéndolo poco, le tengo más simpatía al italiano, quizá porque solía presentarse con sombrero de copa o porque sus canciones suelen ser encantadoramente absurdas y, muchas de ellas, demasiado divertidas, de esas que sólo con empezar a escuchar la musiquilla te ponen la sonrisa en la cara y la libertad en el bazo...

Que sirva como ejemplo la que os presento hoy, "Spendi spandi effendi", que habla de esas personas que todos los días a las cinco de la tarde van a la gasolinera a poner un litro de gasolina... éste concretamente estaba tan desesperado por no tener dinero para llenar el depósito que quería pagar con Cristina... desconcertante, divertido. El vídeo no tiene mucho que ver con la canción, pero también es simpático.

Una broma del destino se lo llevó, con apenas treinta años y seis discos, en 1981, después de un accidente de trafico... bueno, en realidad fueron dos, en el primero se salvó y al salir del hospital tuvo un segundo accidente del que no pudo sobrevivir. Para los amigos de las conspiraciones hay una versión que dice que después del segundo accidente hubo hasta cinco hospitales que lo rechazaron como paciente y murió en la ambulancia. Yo no sé, no conozco tanto su historia ni su obra, pero me gusta y quería hablar de él. Supongo que algún italiano nos sacará de dudas.

Rino Gaetano - Spendi spandi effendi

1 comentario:

Mi chabola dijo...

A mí cuando me contaron la historia, en el `97 (ya llovió), eran tres hospitales. Y subiendo!
Bromas a parte parece que sí que al final lo llevaron a cinco hospitales. Es normal pensar en confabulaciones, no?
Lo más increíble es el haber escrito él semejante peregrinación muchos años antes en una canción que estaba sin publicar (La Ballata di Renzo). Los menos conspiranoicos como mínimo tenemos la duda.